jueves, 13 de septiembre de 2012

La hora del café


Lo supe por la prensa. Es impactante encontrar en los obituarios un nombre conocido. Mi primera reacción fue correr a la funeraria y comprobar si se trataba de un homónimo que, fuera de la desagradable impresión inicial, nada significa en mi vida. Sin embargo, sopesé los pros y los contras de aparecer en un sitio donde el único que te conoce es el muerto.

Terminé de fumar mi cigarro y pasé a la sección de deportes.

Imagen tomada de la red.

martes, 4 de septiembre de 2012

Carnaval


―¡Yo soy Dios! ―gritó el camaleón.
La risa desapareció del rostro de los presentes.
 
 
Imagen tomada de la red.