lunes, 25 de enero de 2010

El abrazo

LUEGO DE HACER el amor nos estrechamos largamente, como faltos de cariño, aceptando que siempre estuvimos solos.
Después de todo, sólo era Auguste Rodin jugando con el mármol a ser Dios .

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y si hubiera implorado a los dioses ese soplo divino, como Pigmalión?

Un abrazo.

Carmen Aguirre

Esteban Dublín dijo...

Está bueno este.