A Noé Villegas, para quien el cielo es más que una fantasía.
Cuando el águila vio al globo aerostático caer, la esperanza de asistir a una mítica proeza se perdió entre las aguas embravecidas del mar Egeo.
Lamentablemente, Ícaro había fallado otra vez en su intento de acercarse al sol.
Imagen de Alejandro Gelaz
7 comentarios:
Manolo, de nuevo gracias por la dedicatoria, es un honor! :)
Un abrazo grande!
Noé, sé de tu afición por el cielo y los aviones.
Saludos.
Pues los premios,además de halagar a los premiados, sirven también para que los lectores arribemos a nuevos lugares. Un gusto visitar el tuyo.¡Y sorpresa mía, que ya conocía muchas de tus historias de otro lado!
!Enhorabuena con el premiado!
Saludos!
Kokeshi - lamonoica
Enhorabuena! Es un micro bueno de verdad.
Un saludo indio
Jesús, de alguna manera, en esto de escribir somo Ícaro, pero siempre con la posibilidad de intentarlo. Saludos.
Kokeshi, así es, nos hemos leído por allá en Ficticia. Bienvenido a este tu blog. Un abrazo.
Indio,de los personajes mitológicos, Ícaro siempre me ha intrigado; debe ser ese deseo humano por volar.
Nos seguimos leyendo. Saludos.
Delicada intertextualidad, merecidísimo galardón.
¡¡Felicitaciones amigo!!
Patricia, no sé si sea merecido el premio, pero a mí me da mucho gusto. Sobre todo porque había minis muy buenas, que pudieron haber sido las galardonadas.
Un abrazo.
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