martes, 13 de noviembre de 2018

15 El moderno Sísifo [Guanajuato, Gto.]



Iba por las calles de la ciudad de Guanajuato con una losa enorme sobre la espalda y una tea encendida en una mano. La gente apenas lo miraba. Emulando al bíblico Simón Cirineo, le ofrecí mi ayuda y un refresco bien frío. Los rechazó con un gesto firme, aunque cordial.
—Luego luego se nota que no eres de por aquí —me dijo el hombre con voz antigua y cansada.
—Usted debe de ser Sísifo —aventuré.
—No, que va. Me llamo Juan José de los Reyes Martínez Amaro, pero todos me conocen como el Pípila.
—¿Tú eres ese que prendió fuego a la Alhóndiga de Granaditas durante la guerra de Independencia?
—A mucho orgullo.
—Y dígame, don Pípila, ¿qué lo trae por aquí?
—De vez en cuando me doy una vueltecita por estas tierras para refrescar la memoria de la gente, para que vean que sí existí, que no soy un invento ni habladuría de políticos oportunistas.